Día mundial de la protección de datos: ¿qué será de la experiencia personalizada del cliente?
En todos los aspectos del día a día, ya sea comprando, leyendo un artículo en línea, reservando las vacaciones o realizando trámites administrativos, se recogen, utilizan y procesan datos personales. La circulación de estos datos nunca ha sido tan importante. Desde la recogida hasta el almacenamiento, los ciudadanos se preocupan tanto por el respeto a su intimidad como por el uso de sus datos. Con el RGPD, la normativa vigente juega a su favor.
La protección de los datos personales, que es una cuestión importante de confianza entre los usuarios y las empresas -y cualquier otro tipo de organización-, es ya ineludible, pero sigue planteando muchos interrogantes. ¿Cómo podemos recoger y almacenar estos datos de forma segura? ¿Podemos seguir utilizándolos sin incumplir la normativa? Su uso sigue siendo crucial para que los vendedores sigan ofreciendo experiencias personalizadas a los clientes, adaptadas a sus necesidades. ¿O debemos abandonar la idea? ¿Debemos renunciar a los servicios personalizados y al libre acceso a los contenidos de Internet?
Las empresas se encuentran en un punto de inflexión: la recopilación de datos de los clientes sigue siendo un reto estratégico, ya que el conocimiento de sus clientes y prospectos es el activo estratégico que les permite responder rápidamente a sus expectativas, a veces incluso anticiparse a ellas, ofreciéndoles servicios pertinentes en el momento adecuado. Sin embargo, su uso abusivo, sobre el que algunos han podido construir su modelo de negocio, choca naturalmente con los límites éticos y regulatorios. El refuerzo del marco jurídico ya no permite la más mínima desviación en cuanto al respeto de la vida privada, ¡y no es de extrañar! – mientras que la confianza vuelve a estar en el punto de mira de anunciantes y consumidores.
En LiveRamp, siempre nos ha preocupado la protección de sus datos personales. No porque queramos obtener beneficios de imagen, sino porque es el núcleo de nuestro proyecto de negocio. No solo porque pudimos prever que esta exigencia se traduciría algún día en ley, sino también y sobre todo porque nunca imaginamos que se pudiera extraer el extraordinario potencial de los datos sin establecer antes una sana relación de confianza entre anunciantes y consumidores.
Con RampID, los datos son pseudónimizados y los identificadores de los clientes están encriptados de manera específica. La empresa puede entonces utilizar estos datos de forma segura en los entornos de su elección que estén conectados a LiveRamp, como los jardines amurallados, pero también en la internet abierta. Y la privacidad de los consumidores está bajo protección. Este es el camino que Carrefour ha elegido con Carrefour Links: utilizando la plataforma Safe Haven, las marcas y sus socios pueden colaborar de forma sencilla y segura para mejorar la experiencia del cliente. La colaboración de datos permite a las empresas de la cadena publicitaria interoperar de forma respetuosa con la privacidad.
En vísperas de la 16ª edición del Día Mundial de la Protección de Datos, conviene recordar que es totalmente posible conciliar el respeto a la intimidad y a los datos personales, ofreciendo al mismo tiempo la mejor experiencia posible en un entorno digital seguro. Es para esto para lo que trabajamos día a día.